Mostraron como se encuentran las instalaciones a un año del acuerdo firmado por las autoridades y el Gobierno para realizar obras de infraestructura.
Los trabajadores autoconvocados del Hospital de Quilmes realizarán un abrazo simbólico para reclamar, entre varias cuestiones, "un plan para la recuperación de las estructuras edilicias, por necesidad presente y por su valor histórico; un plan que tome en cuenta las reales necesidades de los servicios de guardia, internación y consultorios, y de las áreas que motorizan su funcionamiento, y la reparación urgente de los baños, tanto internos como del público", informaron a este medio.
Será el próximo miércoles 19 de mayo, a partir de las 19 horas en las puertas del nosocomio de Quilmes
El 19 de agosto de 2020, se anunció la firma de un acuerdo entre el Gobierno nacional, el director provincial de hospitales, Dr. Juan Sebastián Riera, y del director Ejecutivo del Hospital Iriarte de Quilmes, Juan Fragomeno, para la puesta en valor de las estructuras edilicias del nosocomio.
La seccional de ATE Quilmes, al día siguiente, publicó en su Facebook oficial del hospital: “Una buena para el hospital de Quilmes, tras el reclamo realizado por los secretarios y delegados de ATE Quilmes, por la puesta en valor del nosocomio. Hoy el gobierno Nacional y Provincial toma la decisión de la puesta en valor del hospital, iniciar un plan de inversión para la mejora del mismo”. En la primera etapa se iniciarían obras en el hospital Evita de Lanús y en el Iriarte de Quilmes.
El destino de la inversión en el hospital quilmeño es un misterio: los sanitarios, tanto internos como del público, o están rotos o están clausurados; la estructura edilicia no ha mostrado ninguna mejoría, salvo cambios cosméticos que, en general, se efectúan por donaciones o solidaridad, como es el caso de la pintura del hall central (ingreso por Allison Bell) y de otros sectores de guardia. La realidad es que el edificio no solo no ha recibido mantenimiento, mucho menos mejorías, sino que, las viejas estructuras muestran un grave deterioro.
Sin embargo, es aún más grave que se sigan utilizando para sectores de descanso, para guardar pertenencias o como lugar de trabajo, como es el caso del depósito de residuos patogénicos.
"El único cambio que hemos visto, ciertamente, es la instalación de una ventana en una pared que por ambos lados da al exterior, en el sector de ingreso de internación de pacientes. ¿Será una ventana para ventilar otra dimensión?
Hasta el día de hoy, no sabemos cúal fue el destino del dinero para la puesta en valor", expresaron los trabajadores.
Los trabajadores autoconvocados del Hospital de Quilmes realizarán un abrazo simbólico para reclamar, entre varias cuestiones, "un plan para la recuperación de las estructuras edilicias, por necesidad presente y por su valor histórico; un plan que tome en cuenta las reales necesidades de los servicios de guardia, internación y consultorios, y de las áreas que motorizan su funcionamiento, y la reparación urgente de los baños, tanto internos como del público", informaron a este medio.
Será el próximo miércoles 19 de mayo, a partir de las 19 horas en las puertas del nosocomio de Quilmes
El 19 de agosto de 2020, se anunció la firma de un acuerdo entre el Gobierno nacional, el director provincial de hospitales, Dr. Juan Sebastián Riera, y del director Ejecutivo del Hospital Iriarte de Quilmes, Juan Fragomeno, para la puesta en valor de las estructuras edilicias del nosocomio.
La seccional de ATE Quilmes, al día siguiente, publicó en su Facebook oficial del hospital: “Una buena para el hospital de Quilmes, tras el reclamo realizado por los secretarios y delegados de ATE Quilmes, por la puesta en valor del nosocomio. Hoy el gobierno Nacional y Provincial toma la decisión de la puesta en valor del hospital, iniciar un plan de inversión para la mejora del mismo”. En la primera etapa se iniciarían obras en el hospital Evita de Lanús y en el Iriarte de Quilmes.
El destino de la inversión en el hospital quilmeño es un misterio: los sanitarios, tanto internos como del público, o están rotos o están clausurados; la estructura edilicia no ha mostrado ninguna mejoría, salvo cambios cosméticos que, en general, se efectúan por donaciones o solidaridad, como es el caso de la pintura del hall central (ingreso por Allison Bell) y de otros sectores de guardia. La realidad es que el edificio no solo no ha recibido mantenimiento, mucho menos mejorías, sino que, las viejas estructuras muestran un grave deterioro.
Sin embargo, es aún más grave que se sigan utilizando para sectores de descanso, para guardar pertenencias o como lugar de trabajo, como es el caso del depósito de residuos patogénicos.
"El único cambio que hemos visto, ciertamente, es la instalación de una ventana en una pared que por ambos lados da al exterior, en el sector de ingreso de internación de pacientes. ¿Será una ventana para ventilar otra dimensión?
Hasta el día de hoy, no sabemos cúal fue el destino del dinero para la puesta en valor", expresaron los trabajadores.
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