Por los 219 años de Ensenada, una celebración especial

Las autoridades municipales convocaron a los vecinos a crear imágenes de la bandera de la ciudad para pegar en las puertas Ensenada celebra hoy sus 219 años. Lo hará de una manera especial, ya que las autoridades municipales convocaron a los vecinos a crear imágenes de la bandera de esa ciudad para pegar en puertas, ventanas o balcones. En este contexto tan particular marcado por el aislamiento social obligatorio para evitar la propagación del coronavirus, desde la Municipalidad de Ensenada hicieron la convocatoria para que los vecinos saquen una foto con la bandera creada artesanalmente por cada familia para luego enviarlas a las redes sociales de ese municipio. En tanto, a las 8, las autoridades municipales de Ensenada realizarán un pequeño acto formal para izar las banderas en conmemoración del nuevo aniversario. Ensenada es una de las pocas ciudades de la provincia de Buenos Aires que ha adoptado oficialmente una bandera identificatoria del Partido. Desde 1999, los ensenadenses a través de sus instituciones más representativas homenajean a su ciudad mediante este símbolo, según explican en la Comuna. También indicaron en el municipio ensenadense que por la condición ribereña del distrito que representa, “la bandera de Ensenada muestra, en su paño superior, la línea del horizonte, bajo un cielo azul-celeste y con un Sol que nace, pero que ya se presenta esplendente y con sus rayos flamígeros”. “En el paño medio, de mayor ancho, pues en él se ofrecen los rasgos definitorios del paraje, se dibuja la costa de una “ensenada”, la que le dió nombre al pueblo, bañada por el río, con una “punta”, la Punta de Lara, destacada sobre su margen interior, todo ello cubierto por tapiz vegetal, representado por el color verde-monte”, agregaron. En el paño inferior, del mismo tamaño del superior, bajo la inscripción “Ensenada”, grabada en letras de color amarillo-sol, “aparece el color rojo-sangre, marcando la fusión de todos los orígenes raciales, desde el padre indio hasta el último inmigrante, y como símbolo del amor fecundo y del esfuerzo solidario y creador”, concluyeron en el municipio ribereño.