Además de las condiciones de los/as empleados/as y afirman que “requiere de una modificación inmediata”
Desde el Colegio de Trabajadores/as Sociales Distrito Bahía Blanca, acompañado por los procesos de trabajo de los matriculados/as, así como desde los acuerdos construidos en el Foro de Trabajadores/as sociales de Bahía Blanca efectuado el 22 de Junio de 2021 con la participación de más de 40 colegas afirmaron que “a la par de la agudización de la pobreza, se reiteran y agudizan también dos cuestiones centrales, intrínsecamente vinculadas”.
El reclamo lo hicieron a través de una solicitada presentada en nombre del colegio de los Trabajadores sociales, en la que se menciona que desde el 2019 “esta gestión del Colegio Distrital ha acompañado significativamente una sucesión de notas relativas al tema al área de Políticas Sociales de la Municipalidad de Bahía Blanca” pero que “en ninguna de dichas notas, e incluso denuncias públicas, ha sido factible acordar una instancia de diálogo para el análisis y posibilidad de intervención ante estas condiciones”.
Asimismo, aseguran que es “cuestión social” en contexto de emergencia sanitaria y “la pobreza se presenta profundizada y se expresa en diversidad de condiciones que dan cuenta de la precarización de la vida en todas sus formas”.
Y en relación a otras áreas de trabajo como la Salud; la Educación y la Justicia, declaran que existen situaciones que se reiteran como “la no cobertura de licencias” a partir de “las condiciones de gestión del área de Políticas Sociales de la Municipalidad, de la cual dependen al no contar con recursos propios”.
Teniendo en cuenta los motivos enumerados, que muestran una situación que “requiere de una modificación inmediata” y “ante la agudización de la pobreza necesariamente” es necesario que se den “procesos de expansión y ampliación de los servicios sociales estatales”.
Los miembros sostienen que cuando mencionan la inadecuación de las condiciones de gestión y asistencia de la pobreza se refieren a la “escasez de profesionales en relación a las demandas de trabajo, situación provocada no solo por la no cobertura de contratación de cargos vacantes sino además por el no reemplazo de licencias, con el consiguiente impacto en una sobredimensión de demandas a cada profesional”.
Y además a las “prestaciones insuficientes en relación a las demandas de la población usuaria” y a la “tecnologización del acceso a las prestaciones, sin considerar la profunda brecha digital que caracteriza el acceso a la tecnología de la población usuaria”.
También se resalta la “insuficiencia de prestaciones básicas” y la .”inadecuación de los espacios de trabajo: oficinas que no cumplen condiciones sanitarias ni garantizan la privacidad requerida por la profesión para situar sus intervenciones; originando incluso situaciones de victimización secundaria expresadas en largas filas de usuarios/as al aire libre en esta época del año de bajas temperaturas”.
“En el ámbito municipal expresamente se observa una significativa ruptura comunicacional entre la gestión política y el trabajo profesional, sin instancias de diálogo y sin consideración del conocimiento de las necesidades territoriales que los/as colegas poseen como insumo central para la planificación”, manifiestan los trabajadores.
Además, se explica que hay “un sector cada vez más amplio de colegas contratados en situación de precariedad mediante monotributo; sin derechos laborales; con salarios inferiores incluso en un 50% en relación a sus pares y exigiéndoles como contraprestación idéntica cantidad de horario y responsabilidad”.
