Leandro Santoro finalmente se bajó este martes del balotaje en la Ciudad de Buenos Aires. Jorge Macri, que había cosechado el domingo el 49,6 por ciento de los votos, será el próximo jefe de Gobierno. “Es una decisión que demuestra madurez y carácter”, lo elogió Sergio Massa, y aseguró que sumará al excandidato porteño a su campaña. Incluso adelantó que en caso de llegar a la presidencia lo convocará para formar parte del gabinete.
La opinión de Massa y del comando de campaña presidencial de Unión por la Patria fue determinante en la decisión de Santoro. El domingo mismo de las generales, en el búnker peronista de Chacarita, hubo una primera charla entre ambos sobre los posibles escenarios que se abrían a partir del resultado tan fino en territorio porteño, que había dejado a Jorge Macri a menos de medio punto de consagrarse. Sobre la mesa estaba la pregunta sobre la conveniencia para Unión por la Patria de estirar una competencia muy cuesta arriba y que además podría acarrear efectos indeseables para el balotaje a nivel nacional.
La tesis que se impuso ya desde el lunes en el comando de campaña del peronismo, según distintas fuentes, fue que resultaba preferible evitar el efecto arrastre que Jorge Macri podría imprimirle a la boleta de Javier Milei el 19 de noviembre, sobre todo teniendo en cuenta los puntos en común entre el electorado de ambos espacios. En la balanza pesó tanto la incomodidad de disputar una elección cuasi definida como la necesidad de vaciar el cuarto oscuro de potenciales votantes del libertario, que ya había intentado tender puentes con el primo del expresidente.
Si bien la decisión ya estaba tomada, se había especulado con comunicarla una vez que concluya el recuento definitivo en la Ciudad, pero finalmente se adelantó para la tarde de este martes. El comunicado difundido por Unión por la Patria ahondó en las razones de la declinación. "Una lectura realista del resultado electoral, sumado al apoyo explícito de Javier Milei a Jorge Macri, nos dan la pauta de que sería insensato forzar un balotaje", expuso. "Consideramos que la estrategia correcta es concentrar nuestros esfuerzos en defender la democracia frente a la amenaza autoritaria, contribuyendo a que Sergio Massa gane en la Ciudad de Buenos Aires y sea electo presidente de la Nación", explicitó.
El propio Santoro se explayó más tarde en una entrevista televisiva. “Teníamos el domingo la buena noticia de una gran elección, de 32 puntos, y la mala de que Jorge Macri estaba cerca de 50. El conteo más tarde se detuvo en 49,6 y por eso pedimos esperar al definitivo, sobre todo pensando en la ilusión de quienes nos acompañaron en la campaña y querían seguir dando la pelea. Pero finalmente entendimos que el margen era muy chico y que no valía la pena forzar la segunda vuelta”, reconoció.
"Uno primero piensa en la patria, luego en el movimiento y luego en los hombres. Y la verdad es que nos dimos cuenta, en una decisión colectiva, que si forzábamos el balotaje en la Ciudad tendríamos que ir a buscar al electorado en contra del PRO, y Massa tendría que hacer lo mismo pero a la inversa. No era conveniente. Pusimos al movimiento por delante", agregó.
